Las Normas de la Suciedad

Hace medio millon de años (o más si has leido este Blog con mucha posterioridad a su escritura), Anice se encontraba en el Pinet, lugar de descanso y reposo en su agetreada vida. Dedicaba sus días a visitar la playa y dormir.

Y en uno de sus camintas por la playa, halló (Sí, me reifiero a que se tropezó con) una piedra más grande que su cabeza (Sí, no llevaba lentillas de 25 dioctrias). Y como por supuesto no tenía nada mejor que hacer, la observó. y vió que tenía unos grabados curiosos que no parecían representar nada, así que se la llevó con mucho esfuerzo, puesto que pesaban 2 Chg (2 chorrocientosgramos).

Al llegar a su casa, su padre le dijo:

-Ana, ya no se como decirte que no me traigas basura a casa, primero me traes a los Sucios esos, ahora piedras de 2 Chg -acertando su peso real con su ojo de buen cubero
Y encima con inscripciones...

¿Inscripciones? Anice miró la piedras y se dió cuenta de que contenían un mensaje:

1-Interrumpirás una conversación para contar una anecdota que no tenga nada que ver con el contexto de la propia conversación.

2-Intentarás dominar el mundo sobre todas las cosas.

3-Darás falsos testimonios e insultarás (pero con afecto).

4-Odiarás las negaciones tajantes (¿A quién le puede gustar que le corten el rollo de esa manera?).

5-No te drogarás (Wilson ya se sacrificó por nosotros).

6-Irás siempre PALANTE, nunca PATRÁS.

7-Bailarás ridículamente.

8-Dirás Sucio en vano.

9-Responderás con preguntas las preguntas de los demás

10-Y por último, harás caso a Anice en todo lo que diga (joderos cabrones, los grabados en piedra no se pueden borrar xDDDDD).

Aún que no suelo cuestionar la veracidad de los acontecimientos Sucios, yo diría que esa última frase fue colocada por la propia Anice en un intento de mandato, pero mira, como todo el mundo sabe que estos mandamientos no los cumple ni el tato... pues seguiremos con la vida normalmente.

XIII & Anice